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Katagrafías en el castillo

Exhibición temporal de febrero, marzo y abril

Katagrafías en el castillo

Publicado el 07/02/2018
Jorge "Kata" Nuñez
Jorge "Kata" Nuñez
La Sala 5 de la Casa del Castellano se posiciona como espacio cultural donde destacados exponentes del arte local presentan a un masivo público trabajos con honda vinculación identitaria y patrimonial

Desde su apretura como museo de sitio en 1992, el museo de Niebla ha replanteado su relación con la comunidad local y mejorado sustancialmente su oferta turística y cultural. Trabajos de diagnóstico efectuados por cientistas sociales indagaron en las preferencias y actitudes que los vecinos tenían en ese entonces en relación al "fuerte".

Se abrió el Edificio Administrativo para talleres gratuitos para la comunidad en la Sala Multiuso, se ha utilizado el Foso externo, la sala 5 ha estado abierta todo el año con exhibiciones, los paneles interpretativos de las pasarelas son bilingües, se ha realizado investigación y se ha museografiado los resultados en conjunto a las comunidades vivas. Poco a poco se va entendiendo que la protección y puesta en valor del patrimonio pasa por abrir los espacios públicos en un afán plural, educativo e inserto en el desarrollo local.

Eje económico de la localidad de Niebla y sus alrededores, el Museo de Sitio Castillo de Niebla es uno de los más visitados en Chile, superando los 298.448 ingresos durante el año 2017, año marcado por lluvias fuera de tiempo e incendios incontrolables en la zona del Bio Bio al sur, y que significaron una baja en comparación al 2016 donde se registraron 398.071 ingresos, cifra impulsada por la apretura del monumento que estuvo cerrado por remodelación dos años.

Durante el año 2017 se realizaron 7 exhibiciones temporales, que abarcaban temáticas patrimoniales, historia local, fotografía, pintura y escultura. Durante el 2018 ya se ha presentado la obra retrospectiva de Victor Ruíz, con obras premiadas internacionalmente. 

Para el mes de febrero, marzo y parte de abril,  el museo se enorgullece de mostrar una revisión en distintos formatos de la extensa obra del valdiviano Jorge Kata Nuñez, miembro de las Brigada Ramona Parra (1970) destacó tempranamente como muralista. Vivió siendo muy joven la prisión política y el exilio en dictadura. Holanda supo valorar su talento, donde pudo desarrollar su trabajo artístico, en más de 60 murales en espacios públicos. Actualmente reside en las afueras de Valdivia, en la selva valdiviana que acogió su infancia, prodigando su arte en obras de literatura y trabajos colaborativos con escritores, destacando sin duda sus libros de autor, preciosamente ilustrados y encuadernados.

Posteriormente, se instalará durante finales de abril, una muestra del profesor de arte Claudio Benavides Voittmann, del destacado colectivo Quarzo.

De Katagrafías:

Si no tuviera el hábito de tomar mate, tal vez me hubiera encontrado más tarde con Jorge «Kata» Núñez.

Ese encuentro ocurrió en su libro Mate –volumen hermosamente grabado en madera y encuadernado por él mismo–, que juguetea plástica y textualmente con la infusión americana y sus sugestiones visuales y lingüísticas.

Aunque la xilografía (en la potente tradición clásica y del expresionismo) es el eje que organiza su producción –en un arco que abarca además al aguafuerte, la punta seca, la serigrafía, el dibujo y la pintura mural–, es en el libro de artista donde Kata literalmente despliega su diálogo creativo con los materiales, las técnicas y los temas que lo inquietan. La experiencia del exilio, el erotismo o el cuerpo, y la naturaleza que lo rodea en los montes valdivianos donde vive desde mediados de los 90 (después del exilio en Holanda). Esos son los temas recurrentes volcados en libros concebidos como espacios capaces de enriquecer la creación y la lectura con la incorporación de materiales y procesos en cambio constante. Por ello, el juego y el humor no son raros en su obra, una estimulante experiencia estética hecha de sorpresas.

Con el tiempo, como confesaba el crítico literario Alone, he llegado a emborracharme con todo tipo de chichas, y no pido a las artes más que dos condiciones: la difícil honestidad expresiva (lo directo y sin engaño) y el esfuerzo continuo sobre la materia (el rigor que no afloja). Kata cumple con ambas. [José Mariquina, Niebla 2018]

La obra de este destacado artista valdiviano estará en exhibición en la sala 5 de la Casa del Castellano durante todo el mes de febrero y parte de marzo.